Avanzado en la producción ganadera que demanda la sociedad

El Grupo Operativo SOSTVAN ha organizado una nueva tertulia virtual para presentar los resultados de sus trabajos de investigación en torno a la huella ambiental y el bienestar animal del vacuno en extensivo y, por ende, para la mejora de la sostenibilidad el sector ganadero de vacas nodrizas.

Tal y como quedó patente durante el encuentro, la producción, y de forma muy especial la producción de carne, son cada vez más cuestionadas por su supuesta contribución al cambio climático y a la degradación ambiental del planeta. Por ello, los miembros del proyecto piloto SOTSVAN continúan trabajando en el desarrollo de estrategias tecnológicas para la mejora de la sostenibilidad del sector ganadero de vacas nodrizas. Un trabajo para el que, sostienen, la generación de información rigurosa y transparente es fundamental.

A lo largo de la tertulia expertos y miembros del proyecto compartieron los resultados de tres aspectos considerados fundamentales, "y que, como consecuencia, deben ser conocidos por los consumidores y la sociedad en su conjunto", explican.

Estos aspectos son el bienestar de los animales que viven en las explotaciones de ganadería extensiva de vacuno; la huella de carbono que generan estas explotaciones, incluyendo los procesos posteriores hasta servir la carne al consumidor; y los recursos naturales que se conservan gracias al pastoreo del ganado en dehesas, montañas y otros sistemas silvopastorales de la Península Ibérica.

El pistoletazo de salida lo dio Mireia Llorente Sánchez, investigadora de la Universidad de Extremadura y especialista en huella de carbono y sistemas agroalimentarios, que contextualizó el papel de la ganadería, de la que dijo, es responsable del 14% de la emisiones, si bien, matizó " no toda la ganadería contribuye de la misma manera, y de hecho la cría de ganado en extensivo es menor", también indicó que el cálculo de la huella de carbono es cada vez más importante, "puesto que su reducción es uno de los compromisos de los Estados para mitigar el cambio climático". En lo cálculos llevados a cabo para la realización del proyecto, precisó, "han colaborado 17 fincas, y toda la información ha sido traducida en su impacto de huella de carbono". La conclusión apunta a que las emisiones son mayores cuanto menor es el secuestro, y el secuestro depende del entorno. Asimismo, el promedio de emisiones en España está por debajo de la media europea y muy por debajo de la media mundial, donde está muy industrializada, mientras que en nuestro país está más ligada al extensivo.

Por su parte, Jesús Carrizo Martín, director técnico y de proyectos en De Heus España, profundizó en los avances de la nutrición animal para reducir la huella de carbono y explicó que SOSTVAN ha hecho el estudio de la primera fase del ciclo de vida del ternero, y el resultado es que la huella de carbono del pienso, según los cálculos, no es significativa. Sin embargo, sí lo es la emisión se produce en el animal por las fermentaciones propias de los rumiantes. Para resolverlo, dijo, "lo que sí podemos hacer es aumentar la eficiencia productiva para reducir la huella de carbono, porque mejorar los índices de conversión es una muy buena manera de reducir la huella de carbono". Y para ello, añadió, "hay que hacer formulaciones muy ajustadas a las necesidades de los animales, y hay que conseguir que sea mayor la digestibilidad de la alimentación de los animales, ya que, de esta forma, menor será el índice de emisiones". Por tanto, concluyó, el objetivo, es ser los más eficientes posible en las formulaciones.

Bienestar animal y protección ambiental

El turno del bienestar animal llegó de la mano de Marta Elena Alonso de la Varga, profesora de la Universidad de León y especialista en bienestar animal que comenzó su intervención reseñando que los consumidores están cada vez más preocupados por el bienestar de los animales. El resultado es que las decisiones de compra, en base a lo que ellos manifiestan, reflejan esa mayor conciencia social. Y esa preocupación hace que puedan tomar decisiones de compra que supongan un riesgo para los ganaderos.
"Por ello estamos tratando desarrollar herramientas que permitan demostrar a los ganaderos ese bienestar a los consumidores a través de la Blockchain para que sean consumidores éticamente competentes a la hora de decidir si adquieren productos con un nivel de bienestar más alto o más bajo", remarcó.

Para ello, contó que se ha desarrollado una herramienta que mide el bienestar animal en las explotaciones de extensivo. "Hemos visitado 18 ganaderías en diferentes entornos en la dehesa y cornisa cantábrica. En las visitas se han valorado más de 400 animales y se han tomado datos de 59 parámetros relacionados con el bienestar y con distintos aspectos que permiten valorar el comportamiento del grupo y las instalaciones".

Para concluir, Gerardo Moreno Marcos, profesor de la Universidad de Extremadura y especialista en la gestión y conservación de sistemas silvopastoles, profundizó en el valor natural y los servicios ecosistémicos de sistemas silvopastorales manejados con vacuno extensivo. "Cuando estamos produciendo carne, leche o huevos, estamos produciendo también espacios ecosistémicos" afirmó, no sin señalar que los sistemas de ganadería extensiva tienen una alta biodiversidad porque se llevan a cabo en sistemas silvopastorales con multitud de hábitat e infraestructuras ecosistémicas que albergan una gran biodiversidad. "Y esto produce un beneficio en toda la sociedad", concluyó.
Para finalizar, se celebró una mesa de debate en torno a la producción ganadera que demanda la sociedad, que fue moderada por Jesús López Colmenarejo, director ejecutivo de Grupo Editorial Agrícola-Henar Comunicación.