30/05/2017
La Comisión Europea, a través del Reglamento CE Nº 1831/2003, define y regula los diferentes tipos de aditivos que se pueden emplear para alimentación animal. Los aditivos son definidos en dicho Reglamento como todas aquellas sustancias, que no son materias primas o premezclas, añadidas deliberadamente a los piensos o al agua destinados a animales sanos y que, tengan o no valor nutritivo directo o indirecto, mejoran los índices productivos y previenen la aparición de enfermedades metabólicas respetando el bienestar animal y el medioambiente.
Por: V. Pereira ; R. Rodríguez; I. Orjales; J.M. Chapel; R. Domínguez; P. Vázquez. Del Departamento de Patoloxía Animal. Facultade de Veterinaria de Lugo. Universidad de Santiago de Compostela, del Departamento de Ciencias Clínicas Veterinarias. Facultade de Veterinaria de Lugo. Universidad de Santiago de Compostela y del IMASDE Agroalimentaria S.L.
Uso de prebióticos
El término prebiótico incluye una serie de compuestos indigestibles por el animal que mejoran su estado sanitario debido a que estimulan el crecimiento y/o la actividad de determinados microorganismos beneficiosos presentes en el tracto digestivo. Además, pueden impedir la adhesión de microorganismos patógenos. Los efectos de los prebióticos parecen depender del tipo de compuesto y su dosis, de la edad de los animales, de la especie animal y de las condiciones de explotación.
Entre los prebióticos más estudiados se encuentran los oligosacáridos no digestibles como los fructooligosacáridos (FOS: oligofructosa e inulina), xyolooligosacáridos (XOS), galactooligosacáridos (GOS), rafinosa oligosacáridos (RFO), isomaltosaoligosacáridos (IMO) y mananoligosacáridos (MOS). Los mananooligosacáridos se encuentran actualmente en estudio ya que, además de su conocido efecto sobre la población microbiana y como estimulante del sistema inmunitario, actúan incrementando la biodisponibilidad de los minerales.
Dentro de los prebióticos podemos diferenciar entre: antibióticos, basificantes o tampones ruminales, ácidos orgánicos, extractos vegetales y enzimas. Hasta su prohibición en enero de 2006 (Reglamento CE 1831/2003) el empleo de antibióticos como promotores de crecimiento estaba muy extendido en ganado vacuno, sobre todo el de monensina, ya que permitía el mantenimiento de un rumen saludable, mejorando la eficacia de los procesos metabólicos y la salud de los animales. La entrada en vigor de la directiva europea (Reglamento CE 1831/2003) supuso un reto para el sector ganadero y la industria de piensos compuestos, apareciendo como alternativa a los antibióticos otra serie de promotores de crecimiento como son los probióticos y otro tipo de prebióticos que veremos a continuación. [...]