21/01/2022
A un estricto cumplimiento de la bioseguridad externa e interna de la granja, se une la correcta alimentación según las fases productivas, incluyendo la administración de aditivos que favorezcan la absorción de nutrientes y controlen patógenos disminuyendo, en definitiva, el consumo de antibióticos.
Antibióticos y resistencia bacteriana
La resistencia bacteriana a los antimicrobianos es un proceso conocido desde mediados del siglo XX. Puede ser natural, en el caso de bacterias ambientales que producen antibióticos y a los que ellas, lógicamente, son resistentes, o derivada del uso inadecuado de los mismos. La aplicación de antibióticos ineficaces para las patologías que se pretenden tratar, una posología incorrecta o un suministro excesivo, tanto en medicina veterinaria como humana, suponen el punto de partida para la creación de bacterias resistentes (superbacterias) que originan procesos infecciosos de difícil tratamiento y mal pronóstico. Los antibióticos de “último recurso” ya son ineficaces en la mitad de los pacientes y se presentan resistencias en distintas patologías que, según datos del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, 2019), originan unas 3.000 muertes anuales en España.
Es un problema de salud pública mundial y, de tal magnitud, que en la última década diferentes organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Mundial de Sanidad Animal (IOE) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), han puesto en marcha actuaciones en diferentes ámbitos para controlar esta situación.
En relación con la UE, desde 2011 la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) hace un seguimiento anual combinando datos de resistencia a infecciones derivadas de procesos humanos, veterinarios y ambientales. Es una estrategia conjunta basada en el concepto de “Salud Única” y que se refleja desde 2014 en el Plan Nacional de Resistencias a los Antibióticos (PRAN, 2014-2021) del Ministerio de Sanidad, que establece acciones para reducir el riesgo de aparición y diseminación de microorganismos resistentes.