Carne de conejo, superalimento para deportistas

La carne de conejo constituye una alternativa adecuada en la alimentación de los deportistas debido a su perfil nutricional, sobre todo como fuente de vitaminas del grupo B y por su aporte de proteínas, minerales y sustancias antioxidantes.

Tal como subraya la gerente de Organización Interprofesional para Impulsar el Sector Cunícola (Intercun), Mari Luz de Santos, “la carne de conejo tiene un perfil nutricional que encaja a la perfección con grupos de consumidores como los deportistas y quienes se preocupan de comer alimentos con pocas grasas, bajo aporte calórico y reducido contenido en colesterol y, en suma, por una opción ideal para el buen funcionamiento del sistema cardiovascular y el control del peso corporal, enmarcada en la dieta mediterránea".

Asimismo, el estudio de intervención con carne de conejo en deportistas de élite que realizó la doctora Nieves Palacios, jefa del Servicio de Medicina, Endocrinología y Nutrición del Centro de Medicina del Deporte del Consejo Superior de Deportes, en 2016, concluyó que: "La carne de conejo es magra, aporta pocas calorías por ración, es rica en proteínas, con un alto contenido en minerales y vitaminas, sobre todo vitamina B12, y sustancias antioxidantes".

Así pues, resultaría una alternativa recomendable para los deportistas, dentro de una alimentación equilibrada, teniendo en cuenta los requerimientos individuales. Según el ensayo, las carnes magras, como la carne de conejo, son adecuadas para todas aquellas personas que realizan ejercicio físico intenso o practican algún deporte.

Esta carne es fuente de potasio, que contribuye al adecuado funcionamiento de los músculos, y fuente de selenio, que ayuda a proteger las células frente al daño oxidativo. Además, tiene un alto contenido en fósforo, que contribuye al mantenimiento de los huesos en condiciones normales, y es rica en vitaminas B3, B6 y B12, que ayudan a disminuir el cansancio y la fatiga.

Además, desde Intercun recuerdan la versatilidad de la carne de conejo, que se adapta a platos rápidos y sabrosos, a la plancha o a un día de barbacoa, y ofrece un amplio abanico de posibilidades culinarias a través de nuevos formatos, como ternuras o hamburguesas y elaboraciones al wok o en ensalada. Desde la interprofesional proponen incluir en la dieta recetas como carne de conejo en escabeche frío de cebollitas, boniatos y castañas, o risotto de carne de conejo con calabaza y guisantes.