Economía

La invasión rusa a Ucrania interrumpe el flujo de materias primas para alimentación animal

01/03/2022

Incertidumbre es el término que más se repite en el sector agroalimentario ante las consecuencias de la invasión de Ucrania por parte de Rusia y sus consecuencias en el sector agroalimentario europeo y español, teniendo en cuenta que Ucrania es el principal proveedor de maíz para alimentación animal.


Jorge de Saja, director general de CESFAC, afirma que con la invasión rusa el peor escenario se ha confirmado y que desde el 25 de febrero el suministro por parte de Ucrania se ha interrumpido. En esa fecha partieron desde Ucrania dos barcos, "uno de girasol con destino a Sevilla, que aún no ha llegado, y otro de maíz que iba a Rumanía, y ya no han salido más barcos".

El problema es qué sucederá si el conflicto se alarga en el tiempo, puesto que, a día de hoy, y para el primer semestre del año, no existe alternativa al maíz y las materias primas provenientes de Ucrania, de las que somos muy dependientes Si bien, está prevista una reunión entre los agentes del sector y representantes de Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para evaluar la situación.

Como sabemos, España es deficitaria en cereales e importa anualmente casi el 30% del maíz que necesita de Ucrania, confirman desde ASAJA."En 2018 las importaciones de maíz alcanzaron los 2,8 millones de toneladas, por un valor de 460 millones de euros (España fue el segundo destino de las exportaciones ucranianas de maíz). Además, el 60% de nuestras compras en el exterior de aceite de girasol también proceden de Ucrania, así como el 17% del trigo, el 31% de las tortas de aceites vegetales y el 15,4% de leguminosas grano".

Y es que, se añade desde ASAJA, "Ucrania es, hoy por hoy, el granero de Europa en lo que a cereales se refiere y el primer productor mundial de semillas, harinas y aceites de girasol. De igual manera, el gas y el petróleo ucranianos son la base para la producción de abonos y fertilizantes para toda Europa "y el conflicto armado tendrá consecuencias de peso para el comercio comunitario".

La principal consecuencia será un nuevo incremento de los costes de producción, puesto que el destino de estas importaciones es, fundamentalmente, la elaboración de piensos para ganadería y una falta de suministro derivará en el encarecimiento de estas materias primas, algo que para los ganaderos españoles tendría nefastas consecuencias en estos momentos, ya que, además, nos vemos afectados por la sequía. Es más, este incremento se sumaría a los que ya venía padeciendo el sector, aquejado de una importante crisis de rentabilidad, y que, sin duda, abre la puerta a un panorama incierto y preocupante.

De momento, confirma Jorge de Saja, aunque las cotizaciones se han disparado, los operadores españoles, en líneas generales, tienen reservas para seis semanas -contando desde el 21 de febrero- para cubrir las necesidades de la industria de piensos y no se está comprando materias primas, con lo cual, está por ver qué sucede en los próximos días o semanas.

Editorial Agrícola Conocer la agricultura y la ganadería Libros Agrigultura Ganadería Más que máquinas WEB TV