El Brexit y el modelo de producción ganadera de la UE

Nos encontramos en unos meses convulsos, no hay duda. Dos circunstancias destacan por encimade otras en este sentido, ya que al cierre de esta edición de "Ganadería" se han produci­do dos hechos sin precedentes: se acaban de celebrar unas se­gundas elecciones generales en España en el plazo de seis meses y se ha consumado el "Brexit"' o salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).

De las elecciones generales aún hay poco que decir y más con el verano de por medio. Nos remitimos a editortales precedentes donde ya nos referíamos a la necesidad de una palabra clave que no siempre está presente en la clase política española: diálogo,ya que solamente acercando posturas entre distintos planteamientos, podremos tener esa estabi­lidad que nuestros ciudadanos nos demandan, entre ellos evidentemente los que esten en el medio rural.

En lo referente al "Brexit" afortunadamente no parece que en términos de comercio exterior ganadero, la situación pueda calificarse de dramática para España, ya que el peso relativo de las exportaciones al Reino Unido no es excesivo frente a otros sectores como frutas y hortalizas. Analizando los sectores afectados, estos valores únicamente son algo relevantes en carne de porcino y de ave, pero en el primer caso supone solo un 5% del total de nuestras exportaciones a la UE (con un valor algo superior a los 100 M€ anuales) y en huevos y carne de pollo, no llega al 15% res­pectivamente de todo lo que se envía a otros países de la UE. En vacuno de carne desde la época de las '"vacas locas", el mercado británico ha estado muy cerrado al comercio con lo que el "Brexit" tampoco supone, en principio, un daño excesivo al comercio cuando la ruptura se consume, y en car­ne de ovino los productos que se producen y se consumen en el Reino Unido y España son muy distintos. Esta es una lectura técnica y esperarnos que objettva de la situación, pero desde estas páginas siempre nos gusta apor­tar nuestro "granito de arena" a la reflexión más profunda.