21-11-2012
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en colaboración con la Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha y la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid, ha organizado los días 19 y 20 de noviembre, un ejercicio de alerta en tiempo real de Fiebre Aftosa en esa Comunidad Autónoma.
Para ello se han reproducido síntomas clínicos compatibles con la enfermedad en una explotación de vacuno, en un centro de reproducción animal localizado en la provincia de Toledo, en el municipio de Talavera de la Reina, y se ha realizado un seguimiento de las actuaciones de los diversos servicios involucrados, desde el veterinario de la explotación hasta el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), los servicios veterinarios autonómicos y el Ministerio.
Durante el simulacro se ha llevado a cabo la toma y envío de muestras al Laboratorio Nacional de Referencia de Algete y la comunicación de la sospecha. En la realización de este ejercicio, que ha sido comunicado previamente a la Organización Mundial para la Sanidad Animal (OIE) y a la Comisión Europea, han participado más de 50 expertos de sanidad animal. La auditoría del simulacro ha sido realizada por personal externo al MAGRAMA y a la Consejería de Agricultura del Gobierno de Castilla-La Mancha, coordinado por la Universidad Complutense de Madrid.
· Evaluar la coordinación del Ministerio con las comunidades autónomas (CCAA) ante la notificación de un brote de fiebre aftosa en España.
· Analizar la existencia y eficacia de los planes de contingencia contra la enfermedad.
· Valorar la capacidad que tienen los servicios veterinarios de las CCAA para identificar las granjas que podrían verse afectadas como consecuencia de un brote.
· Evaluar la actuación de los servicios veterinarios de las CCAA en caso de que tengan que mandar al laboratorio muestras potencialmente infectadas con fiebre aftosa.
· Estudiar la respuesta del Laboratorio Nacional de Referencia en caso de recibir muestras de la enfermedad.
La realización de este tipo de ejercicios permite evaluar la adecuada preparación de los Servicios Veterinarios ante situaciones reales de alerta, la idoneidad de los Planes de Alerta, entrenar al personal involucrado en este tipo de sucesos y mejorar la coordinación entre las distintas administraciones involucradas.