24/04/2019
El proyecto, pionero en nuestro país pero con recorrido en Francia, propiciará que los consumidores voten qué tipo de leche quieren consumir, a qué precio y en qué medida se remunera el trabajo de los productores. Annaick Locqueneux, coordinadora de la iniciativa en España ha explicado los objetivos y la hoja de ruta de la marca de los consumidores en nuestro país y cuyo principal fin, ha dicho, "es ayudar a los productores a poder vivir dignamente". Locqueneux ha detallado que esta iniciativa es más que en un producto. “Vamos a adaptar el proyecto a España. En tres semanas más de 5.000 personas ya han votado porque la gente quiere decidir lo que compra y cómo. Empezamos desde la creación del producto, decidiendo de forma personal los criterios. Hasta ahora nadie nos había preguntado que queríamos consumir. Con la “Marca de los Consumidores” cada uno decide qué tipo de leche quiere. Son cosas sencillas, de sentido común”.
La vertiente práctica ha sido abordada por el ganadero francés Régis Mainguy, que ha contado su experiencia tras dos años produciendo leche para esta iniciativa. “Los consumidores tuvieron el poder para apoyarnos al principio en nuestra guerra en Francia contra los precios abusivos de la distribución. El brick de leche de "La Marca de los Consumidores" me salvó la vida, ya que pasé a cobrar 4 céntimos más por cada litro de leche, lo que provocó la mejor de mi futuro, pudiendo invertir y desarrollar de manera más digna mi trabajo”.
Por su parte, el responsable de Mercados Agrarios de la Comisión Ejecutiva estatal de COAG, Andoni García, ha asegurado que esta iniciativa aporta mucha transparencia, porque permite al consumidor decidir cómo quiere su leche y saber lo que el productor percibe por lo que compra: “Cada mes, 70 ganaderos se ven obligados a echar el cierre por falta de rentabilidad. De media, el productor está recibiendo 0,32€/l, mientras que los coste de producción se sitúan en nuestro país entre 0,32-0,35€/l. En 2012 había cerca de 20.000 ganaderos de leche en el Estado español. En febrero de 2019 apenas quedan 13.400, un 30% menos”, ha dicho.