29/01/2021
Así, en 2020 el país exportó un total de 266.153 cabezas de vacuno vino, casi 30.000 animales menos que en 2019.
Así se puso de manifiesto en el Seminario sobre Exportación de Ganado Vivo liderado por Bord Bia. Un encuentro destinado a informar a todos los implicados en el sector acerca de la situación del mercado, los cambios en requisitos técnicos y de manejo, así como en la legislación, la logística y otros factores que afectan al sector de forma global.
España, a pesar de haber importado un 11% menos, continúa siendo el primer destino del ganado vivo irlandés, con 81.280 cabezas. La mayor caída se produjo en los mamones menores de 80 kg, con un cambio en la demanda hacia mamones de cruces cárnicos, sobre todo de raza Angus, en detrimento de los mamones frisones. Por otro lado, aumentaron en unas 1.000 cabezas las exportaciones a nuestro país de ganado mayor y cayeron ligeramente las de pasteros.
Dentro del balance de ventas al exterior del ganado vivo irlandés en 2020, destaca la caída del 42% en las exportaciones a Países Bajos, así como el incremento del 92% en las ventas hacia Irlanda del Norte. Esto se ha debido, en el primer caso, principalmente al descenso en la demanda de ternera blanca debido a la COVID-19 y, en el segundo caso, a los preparativos por el cambio de escenario motivado por el Brexit.
Tal y como indica Bord Bia en un comunicado, tanto este organismo, como Teagasc -la autoridad irlandesa responsable de los servicios de investigación y desarrollo en el sector agroalimentario-, la ICBF ( Irish Cattle Breeding Federation) y el Ministerio de Agricultura irlandés siguen trabajando para mejorar las aptitudes de los mamones irlandeses para su finalización en el mercado español.