24/03/2020
En el bovino, debido a que la vía de contagio más frecuente es la inhalatoria, a través de aerosoles que contienen la bacteria, los animales infectados por M. bovis suelen presentar las lesiones granulomatosas típicas de esta enfermedad en pulmones y nódulos linfáticos asociados. Sin embargo, en algunos casos se observan lesiones tuberculosas en otros órganos como nódulos linfáticos de la cabeza, hígado, riñón o bazo, y que se asocian a otras vías de entrada del patógeno o a infecciones generalizadas.
La tuberculosis es una enfermedad que causa importantes pérdidas económicas a nivel mundial. De hecho, se considera que en las últimas décadas esta enfermedad, individualmente, ha tenido una repercusión económica mayor que el resto de enfermedades que afectan al ganado doméstico en su conjunto.
Además, la tuberculosis bovina tiene una elevada importancia para la salud pública al tratarse de una enfermedad zoonótica que puede ser transmitida a personas, sobre todo, a aquellas que tienen un contacto directo con animales infectados, como ganaderos, veterinarios u operarios de matadero.